El trampantojo de la bici eléctrica en Santander

Verdes Equo Cantabria critica la eliminación de las bicis públicas convencionales por un servicio más caro y excluyente

Las altas tarifas y la falta de un proceso participativo convierten al servicio de bicicletas eléctricas en un nuevo acto de greenwashing del Ayuntamiento de Santander, con Gema Igual a la cabeza, no pensado para la población residente y/o trabajadora sino principalmente orientada a turistas, una trampa o ilusión con que se engaña a alguien haciéndole ver lo que no es.

El partido Verde ha analizado el servicio municipal de bicicletas eléctricas de Santander, coste, distribución de estaciones, unidades, carriles disponibles,… destacando entre otros aspectos, que desplazarse durante 25 minutos por la ciudad, con las nuevas bicis eléctricas, para cualquier trámite diario no debiera suponer un desembolso “extra” después de haber pagado un bono anual de 36 euros. Siendo a su vez un grave error, el suprimir el anterior servicio de TusBIC de bicicletas “musculares”.

En ese análisis, se ha visto que si bien los puestos instalados de las bicicletas llegan a parte de los barrios que antes no se llegaba con la bicicleta pública convencional, el criterio de ubicación y el número de elementos en algunas estaciones no tienen demasiado sentido. Si algunas de las unidades de 20, 17, 15, se redujeran a menor número permitiría ampliar esa red a otros puntos de la ciudad que en este momento no tienen esa opción. Igualmente la distancia entre algunas estaciones que ha sido analizadas, no guarda sentido (dos estaciones próximas en la calle Ernest Lluch, por poner un ejemplo). Estas circunstancias si hubiera habido participación ciudadana y de colectivos sociales, probablemente estarían mejor ubicadas. No hay que olvidar que no existe carril bici para unir todas ellas, ni mucho menos por el centro de la ciudad.

bici como cambio social en Santander

Estaciones de bicis eléctricas

Gabriel Moreno coportavoz de Verdes Equo cree “necesario dotar a Santander de verdadera infraestructura ciclista de calidad, así como de una trama y un carril bici central que logrehacer crecer el uso de la bicicleta exponencialmente para los desplazamientos diarios

Igualmente, es ver notoria falta de transparencia de los datos obtenidos con los usos de ese medio de transporte, lo que, si se apoyase en unos datos abiertos, facilitaría la labor de gestión del servicio como traslada Mónica de la Parte.

bici como cambio social en Santander

Imagen creada por IA

Gabriel Moreno coportavoz de Verdes Equo cree “necesario dotar a Santander de verdadera infraestructura ciclista de calidad, así como de una trama y un carril bici central que logre, hacer crecer el uso de la bicicleta exponencialmente para los desplazamientos diarios”

Igualmente, es ver notoria falta de transparencia de los datos obtenidos con los usos de ese medio de transporte, lo que, si se apoyase en unos datos abiertos, facilitaría la labor de gestión del servicio como traslada Mónica de la Parte.

A todo lo anterior, destacan la falta de políticas reales y eficaces para lograr se cumplan y respeten los límites de velocidad, calmado de tráfico, y semaforización a favor de los peatones y no siempre como pasa en esta ciudad, en beneficio de los coches.

Todo ello pone de manifiesto que el servicio de bicis eléctricas no es lo que parece, es un trampantojo: no es una medida real para fomentar el uso diario de la bici en la población de Santander, ni una acción eficiente ya que se convierte en un servicio caro ni mucho menos energéticamente sostenible ya que la energía eléctrica no es de fuentes de energías renovables con el actual contrato de suministro del consistorio, y que además no está al alcance de todos los bolsillos.

Verdes Equo Cantabria termina exponiendo que la sostenibilidad (social, ambiental y económica), la salud humana, el medio ambiente y la crisis climática son una realidad y que con las políticas de #MarketingBarato del actual equipo de gobierno municipal, no se avanza en la dirección necesaria y marcada por la UE, nos la estamos jugando.

Se debe apostar de manera decidida por la bicicleta como motor de cambio social, accesible, económica, segura y fácil de usar.